jueves, 19 de junio de 2014

Peluquería

31 años tiengo, y en estos 31 años jamás de los jamases me ha tocado el pelo nadie que no sean mis peluqueras de toda la vida: mi tía y mi prima. Con ellas sé que puedo entrar por la puerta y decir ´Hazme lo que quieras, pero que se me vea diferente a como siempre´ y sé seguro que ni me van a rapar el pelo ni me lo van a poner de azul ni me van a hacer ninguna extravagancia. Me conocen y saben qué significa ´lo que quieras´

7 años llevo casi ya fuera de España, y como les pasa a muchos otros emigrados, en las vacaciones en casa thay cita obligatoria con la peluquería....hasta el día de hoy, nunca me había puesto en manos de una peluquera escocesa u holandesa. Lo he hecho porque teniendo un evento importante la semana que viene no me quedaba otro remedio. Y os puedo asegurar que si depende de mí pasaran 7 o 17 años más hasta que vuelva a repetir experiencia.

Empezaré diciendo que he ido preparada para salir llorando. Tantas historias me habían contado de las peluquerías holandesas que estaba esperando mi turno y me estaba pensando el salir corriendo. 

Cosas que había escuchado (de fuentes fiables) sobre las peluquerías holandesas:

- Que no te lavan la cabeza si no lo pides (y por supuesto lo pagas)
- Por tanto, para cortarte las puntas, te las mojan un poco con agua pulverizada (flis flis)
- Que no te secan el pelo si no lo pides (y lo pagas)
- Que cuando pides (y pagas) el secado, simplemente te pasan el secador para quitarte la humedad pero no te lo moldean.
- Que sales de la peluquería con un agujero en la cuenta de banco

Ahora mi experiencia en una peluquería que me habían recomendado:

- Me han lavado la cabeza sin pedirlo (aunque lo he pagado)
- No me han pulverizado el pelo sino que me lo han lavado de verdad
- Sí me han secado el pelo sin pedirlo, para después ´arreglarme´ el corte (pero también lo he pagado)
- El secado ha sido lo que he descrito arriba, me le han pasado el secador y tan cual ha quedado me lo han dejado. Ni moldear ni hostias. Supongo que si lo pides, te lo moldean y peinan, pero no quiero ni saber el coste.
- Mi cuenta de banco no tiene un agujero, pero tampoco me ha salido más caro que en España. Lavar, cortar y secar 35 euros

Ahora os pongo una foto (a la izquierda) de lo que yo quería y otra (a la derecha) de lo que me han hecho habiéndoles enseñado la foto de la izquierda:



Matizaré que la foto de la izquierda fue tomada al día siguiente de ir a la peluquería, pero sin haberme lavado ni arreglado yo el pelo. La foto de la derecha la he tomado media hora después de salir de la peluquería. La diferencia en el flequillo es cosa mía, pero el salir de la peluquería como si me hubiese levantado de la cama no es cosa mía. Supongo que cuando me lave yo el pelo y me lo arregle yo me quedará mejor que el de la peluquera (?????).

DE todos modos, diré que después de haber oído y visto otros casos, me puedo dar por contenta. Y que Diwali y Vlinder, que llevan en Holanda más que la reina, mi corte de pelo (y similitud con lo solicitado) se puede considerar como ´aprobado´

Conclusión, que no me vuelven a pillar en otra de estas

jueves, 12 de junio de 2014

Tercera Parada: La Suiza de verdad

Y para acabar con la trilogía: Tras Annecy volvimos a Ginebra, donde nos esperaba M. nuestro segundo Couchsurfer para llevarnos a un Spa con vistas a los Alpes. Para los que tengáis curiosidad, aquí podéis ver fotos de su web: http://www.bainsdelagruyere.ch/

Fue una experiencia.......religiosa. Bueno no, eso es lo que decía el señorito Iglesias. Indescriptible. Estar en un jacuzzi con vistas a las montañas. Disfrutamos como enanas. No es que estuviésemos ya muy estresadas con el viaje, pero vino bien para relajarnos (aún más). De camino desde Ginebra hasta el spa iba mirando por la ventana con la mandíbula descolgada. La carretera hace zig zag junto al lago y entre montañas. Acostumbrada ya al paisaje plano de Holanda aluciné con el paisaje montañoso de la suiza francesa. Ese paisaje no lo hubiese visto si nos hubiésemos quedado en Ginebra y si no hubiésemos topado con M. Con tanta maravilla paisajista, y con la mandíbula aún descolgada pregunté a nuestro CouchSurfer cómo puede ser que el agua sea tan cristalina en el país y cómo puede ser que un paisaje tan bonito, y siendo Suiza tan conocida, no esté ya echado a perder con apartamentos 'en la montaña' o a pie de lago....la clave se llama protección (no puedes edificar donde te salga del pie) y conciencia sobre el medio ambiente. Difícil fue de procesar el siguiente dato: sólo el 30% del territorio suizo es urbanizable. Os lo podéis creer?? El 70% no está (ni puede ser) urbanizado.

En casa de M. descubrimos otra cosa que nos maravilló igualmente: el cuarto secadora. En Suiza (hablo siempre de la parte francesa, de la italiana o alemana ni papa tengo) tienen un cuarto de lavadoras comunitario (lo cual me parece muy práctico si vives sólo) con lavadoras a compartir con los vecinos (con horarios claro) Además, este edificio en concreto tenía un cuarto donde tu cuelgas tu ropa en unas cuerdas, enchufas un aparato y te largas. El aparato reseca el ambiente de la habitación y tu ropa se te seca. Jamás había visto este sistema.



Al día siguiente hicimos nuestra ruta de chinos para descubrir lo máximo en el mínimo rato. Nuestro maravilloso host nos llevó al Castillo de Chillón, a comer a un museo de quesos en Gruyere (no entramos al museo, sólo comimos en él, venimos de un país de quesos, sabemos como hacen el queso) y a ponernos moradas de chocolate a la fábrica de chocolate Cailler (gama alta de Nestle) . Además estuvimos paseando por el pueblo de Gruyeres , muy bonito pero excesivamente turístico hasta el punto de no estar segura de si era un pueblo de verdad o un 'museo' para turistas. Además Leticia entró al Museo de Alien (la película). Yo ni he visto la película ni me moría por entrar a un museo que no me interesaba cuando había un sol estupendo fuera y unas vistas a las montañas más estupendas aún.

Acabamos nuestras aventuras por la Suiza de verdad (la que nos hubiésemos perdido si nos hubiésemos quedado en Ginebra) con un corto paseo al lago a la altura de Morges (a 5 km de Lausanne) que incluyó metida de pinreles en el agua lo justito como para inmortalizar el momento (a mí casi se me caen a pedazos, y se ve clara diferencia entre las fotos 'posadas' y las fotos 'robadas')

Conclusión...sal de Ginebra, hay todo un mundo fuera esperándote! Me encantó!

miércoles, 11 de junio de 2014

Segunda parada: Annecy

En un principio nuestro plan era pasar 4 días en Ginebra, pero a mí se me hacía muy chica. Y de hecho, una vez en la ciudad vimos que si nos hubiesemos planeado quedar los 4 días hubiesemos tenido que improvisar excursiones, porque realmente Ginebra se ve en un día. El caso es que una amiga, K, se planteó unirse al viaje (aunque se quedó en agua de borrajas) pero nos dió una idea muy buena: visitar la recientemente escogida segunda ciudad de canales más bonita de Europa. No, Venecia ni es la primera ni es la segunda. La primera es Utrecht, la segunda Annecy.

Annecy está a poco más de una hora en bus de Ginebra. Si sobrevives la tenebrosa estación de autobuses, el camino de Ginebra a Annecy te va a encantar. La mayoría del trayecto se hace por carreteras que pasan por pueblitos y por campos con mansiones enmedio. Quien pillase una de esas...en la estación de buses de Annecy (mucho más decente donde vamos a parar…) nos esperaba nuestra primera Couchsurfer!!!! 5 años llevo en Couchsurfing y esta es la primera vez que dormimos en casa de alguien a través de este sistema. Marienne y su novio son franceses. Tras recogernos nos llevaron a su casa, nos enseñaron la habitación en la que íbamos a dormir, nos presentaron a su gato (que no paraba quieto!) y nos dieron de picotear queso y cerveza mientras charlábamos de unas cosas y de otras. Estábamos muertas de cansancio, pero reservamos un poco de energía para cenar con ellos J .

Al día siguiente teníamos hasta las 3 de la tarde para explorar la ciudad. Nos levantamos prontito y salimos de casa como a las 9.30 . Una pena que nuestra couchsurfer no pudo acompañarnos, pero bueno, para una ciudad como Annecy no necesitas guía. Ella nos dio un mapa, pero ni eso es necesario, si eres capaz de llegar al pueblo viejo, vas a ser capaz de ver la ciudad entera sin mapa ni nada.

Nosotras hicimos parada técnica en el H&M porque con el calor que hacía no aguantábamos los pantalones. La siguiente parada técnica fue para meternos entre pecho y espalda una buena crepe de chocolate con nueces. Es un crimen estar en Francia y no jalarse una de esas. Entre ponte bien y estate quieta yo creo que no empezamos a pasear por el pueblo-ciudad hasta la 1 casi, y a las 2.30 teníamos que ir hacia el autobús. Paseamos entre la marabunta de gente, junto a los canales. Sorprende ver lo clara y limpia que está el agua (en Ginebra también). Por suerte había mercado, así que también pudimos verlo (es una de las cosas que se mencionan en todas las guías que leí). Nos pasamos medio paseo intentando resistirnos al olor de los fuets, salchichas y demás cosas ricas francesas….hasta que caímos en una de las ofertas: 9 por 20 euros. A dividir entre dos nos salía a 10. Demasiado bueno como para seguir resistiéndonos. Dicen que la mejor forma de resistir la tentación es caer en ella, y mejor caer en una buena oferta que en el siguiente puesto.

En poco menos de una hora ya habíamos visto el pueblo y habíamos subido al castillo. Siguiente parada: el lago. El plan inicial era pasear junto al lago, pero con el solazo que había, y el recuerdo del día anterior en el barco de Ginebra aún fresco hizo que tardásemos medio segundo en buscar un barco a pedales para alquilar media hora. Sólo media hora porque es el tiempo que nos quedaba para salir por patas al autobús. Y nos supo a gloria. Y mucho más económico que en Ginebra.

Conclusión: visita a Annecy totalmente recomendada, pero en un día soleado, si llueve pierde toda la gracia. Como ciudad para ver me gustó más que Ginebra (la cual no me pareció nada especial) pero es chiquitita chiquitita, te da de sobras con medio día. Un tip, no fuimos capaces de encontrar un lugar donde dejar las mochilas, así que pasamos el día con (más de) 10kg en la espalda. Si lo que llevas es una maleta de mano te vas a pasar el día arrastrándola, lo cual no es muy divertido. Que no lo encontrásemos nosotras no quiere decir que no hay, que conste, pero al menos ni en la estación de buses ni en la de trenes (preguntamos).

Otro comentario, si no sabes nada de francés lo vas a pasar mal, porque a pesar de que el lugar está hasta la bandera de turistas, no quiere decir que la gente allí hable inglés. Nos dimos cuenta ya nada más subir al autobús en Ginebra. El conductor no hablaba ni papa de otro idioma que no fuese francés. Y este comentario, ‘surprisingly’ lo haría extensivo a toda la parte francesa de Suiza, incluida Ginebra (aunque en menor medida). No sabéis como de bien nos vino el que yo recordase algo de francés del instituto…de hecho, me han entrado ganas de apuntarme a clases y tratar de recuperar el B2 que en teoría tenía a los 20 años…y que ahora no pasa de A2, una pena.

viernes, 6 de junio de 2014

Primera parada: Ginebra

Este pasado jueves era festivo en Holanda, y como cada vez que puedo, me fui de viaje. Esta vez con L. El viaje completo fue Suiza (la parte francófona) y Annecy (Francia). En Ginebra pasamos el primer día y medio día el último.

Antes de partir, escuchamos por parte de mucha gente comentarios sobre cuan cara es la ciudad, con lo cual las dos fuimos preparadas a arruinarnos, a tener un agujero en nuestras finanzas para el resto del año....vamos, fuimos con las expectativas muy altas...y planeamos el viaje para que nos saliera un poco menos caro: el primer día comer de bocadillos traidos de Holanda (nos habían dicho que una coca cola costaba 8 eurazos) e intentamos dormir a través de CouchSurfing...

Que Ginebra es caro...sí, pero no tan caro como esperábamos. O eso o nos hemos perdido algo importante. Para empezar, primera sorpresa, el tren desde el aeropuerto hasta la ciudad es GRATIS. Coges tu billetito antes de salir de la zona de maletas. La coca cola no cuesta 8 euros, sino 3 (un poco más que en Holanda) igual que un helado. Por una cerveza local en un festival pagamos 5 euros (en Holanda pago unos 4 por ese tipo de cerveza especial). Comer no lo sé, porque comimos de bocadillo, pero vi un restaurante cerca de la catedral que cobraba 70 francos (57 euros) por un menú. Nos dijeron que lo normal son 30-40 francos (de 25 a 35 euros) que viene a ser más o menos lo que te encuentras en Holanda. Osea, caro sí es, pero al menos viniendo de Holanda la diferencia no es brutal.

Una cosa que me llamó mucho la atención es el pijerío y ostentación que se respira en la ciudad. Empezando por los coches: Audi, Mercedes, Porsches, Ferraris...por todos los lados. Tiendas de ropa no vimos ni un Zara o H&M sino más bien Prada y demás diseñadores. Vimos tambien mucho español, pero mucho español pijo de edad media con su familia, no los muertos de hambre que nos vamos a UK o a Holanda con una mano delante y otra detrás. Vale que hay organismos europeos en Ginebra, pero en La Haya también y no se respira tantísimo lujo. Una de mis suposiciones es que con la crisis en España, muchas familias de bien de España cogieron a su familia y sus millones y se largaron a Suiza con su paraiso fiscal. También vimos un grupo de abueletes que tenían toda la pinta de ser de la generación de inmigrantes de los 50-60 (al estilo 1 franco 50 pesetas). A esos no se les veía lujo. Ya os digo que son sólo impresiones/suposiciones mías.

En cuanto al turismeo en la ciudad, me sorprendió que no hay, como en la mayoría de mis últimos destinos, tours de esos en los que en 3 horas te enseñan la ciudad andando y al final del mismo les das la propina. Ni siquiera hay tours de los de pago. Lo que te ofrece la oficina de tourismo es un audio en diferentes idiomas para que lo sigas. A precio de oro. O el típico bus turístico, que para Ginebra, no lo recomiendo, más que nada porque el casco antiguo es peatonal. Ah! Ahora que me acuerdo, también vimos el trenecito turístico. En fin, que nosotras pasamos mil de eso y lo que hice fue buscar la ruta yo mismo. Por internet se encuentra de todo. Nosotras seguimos este tour:

http://www.tripadvisor.com/Travel-g188057-c127289/Geneva:Switzerland:Sightseeing.In.Geneva.html

Te cuesta un par de horas si haces fotos como chinos en todos los rincones. Como nosotras.
Tuvimos la suerte de que hacía un sol expléndido y un calorcito abochornante, así que era un día perfecto para hacer la turistada de meterte en un barco y surcar el lago! Había dos opciones, un tour de una hora o un tour de dos en un barco de vapor. No recuerdo el precio exacto pero fue un riñon y medio del otro. Unos 50 euros por dos personas? No sé, no estoy segura, pero fué lo más caro del viaje. No nos arrepentimos, que conste, porque estar dos horitas en una tumbona de un barco viendo la costa de Ginebra es de lo más relajante. L se echó la siesta, yo me puse palillos en los ojos para intentar no dormirme, y puse mi cuerpo en modo relajación total (lease agilipollamiento total)

Tras el barco nos fuimos de paseo siguiendo la costa y acabamos en un parque lleno de gente tomando el sol, algunos en bikini, y no sólo en el parque sino en cada cachito de cesped que había en el camino, entre el asfalto y el paseo marítimo. Me recordó a Escocia.

Nuestra siguiente parada en el viaje iba a ser Annecy (en Francia) así que nos fuimos a la estación de buses de Ginebra....y ambas dos tuvimos la misma impresión. La estación de bus, desde donde parten buses a Francia, España, Holanda, Alemania, etc dista mucho de estar a la altura de lujo del resto de la ciudad. Es tercermundista total. Me recuerda a la estación de buses de Zaragoza antes de que se hiciese la intermodal....una muy mala tarjeta de presentación para la ciudad...claro que todos los que estabamos allí esperando un bus no éramos clase social alta...se veían inmigrantes africanos principalmente. Y nosotras.

Para acabar, un tip. Llegamos a Ginebra con mochila de montaña. Ver la ciudad con 10 kg en la espalda no mola nada, así que buscamos lo primero una taquilla donde dejarlas. En la oficina de turismo nos dijeron que en la estación de tren había taquillas pero que planeaban quitarlas el 1 de Junio de 2014 (osea, ya no están, una pena). Lo que hicimos fue preguntar en la estación de buses...sí, ese agujero negro...y por un módico precio de 7 francos por unidad, la señora que vende tickets nos guardó las mochilas junto a su silla. Vale que no es lo más profesional del mundo, pero a nosotras nos hizo el papel!

lunes, 2 de junio de 2014

Carta de motivación

Tenía otro post casi acabado, pero con las noticias de actualidad he visto lo que ha escrito mi amiga Maria José en su Facebook y no me he podido resistir. MJ, para rey no sé si vales, pero para escribir te digo yo que sí:

"Carta de motivación para el puesto de rey, de Maria Jose:
En referencia al puesto que ha quedado vacante recientemente:
Que puedo decir. Quiero ser Rey. Siempre he soñado con ser Rey, desde mi más tierna infancia, cuando cogía la corona del roscón, la toquilla de la abuela y el plumero y paseaba regiamente por el pasillo de mi casa, saludando a mis súbditos imaginarios con un ligero movimiento de muñeca.
Podría resumir en esta carta, los títulos, masters, postgrados, idiomas, experiencia internacional, etc. Pero eso lo tenemos muchos españoles a lo largo y ancho de España y, cada vez más, del extranjero. No, yo soy plenamente consciente de que para este puesto hacen falta otras cualidades más, digamos, indefinibles. Que yo, disculpen la osadía, tengo.
Soy entrañable y campechana. Tengo un amplio repertorio de chistes y bromas que estoy segura causarán sensación entre periodistas y súbditos. Además, me tropiezo muy bien, cayendo con mucha gracia y salero. Me gusta la buena comida, el buen vino, la ropa cara, los zapatos impagables, los yates… Adoro Mallorca y los cruceros por el Mediterráneo. Podría pasar allí todo el verano sin que se note apenas que estoy trabajando. Estoy dispuesta a hacer cualquier tipo de sacrificio: tener amantes, salir en moto, de cacería… Asistir a cenas interminables sin dar un ruidito de guerra.
Doy bien en la tele y los discursos de Navidad me salen con una gran naturalidad. Leo cualquier texto con claridad y entonación. Podría, incluso, representarlos, aunque quizá consideren que esto podría suponer una clara sobre cualificación para el puesto.
Escribo desde la ilusión y el convencimiento de que puedo igualar, e incluso superar, a mi antecesor en el puesto. Yo me lleno, no solo de orgullo y de satisfacción, sino también la cartera, las cuentas en Suiza y lo que haga falta.
Por último, si esta carta de motivación no ha sido de su agrado, lo siento, me he equivocado, no volverá a ocurrir.
Un cordial saludo"